lunes, 2 de febrero de 2009

De resaca con y por Dumas.

Lo más divertido de celebrar algo no es el hecho, si no el recuerdo. Lo mejor no es un día de borrachera, sino revivirlo de nuevo, al día siguiente, con la mente nublada, con el cuerpo dolorido.
Hoy Dumas cumple años, lo celebramos hace dos días, un sábado largo con demasiados grados de alcohol. Para él es este post. 
Dumas es de esas personas que te hacen sentir especiales, que siempre consigue que no te enfades, haga lo que haga. Dumas es un niño que juega en un cuerpo de casi dos metros de altura; que no sabe reaccionar ante un regalo inesperado.
Para ti, Dumas, mi amistad incondicional.
P.D.: sigo prometiéndote que este año encontraremos el amor

No hay comentarios:

Seguidores